de la voz…
Cuánto puede demorar una voz
en qué punto estalla
¿no notás lo que se abre?
El tajo que crece y crece
y nos absorbe con su lengua espinosa
¿cuál es el límite del golpe seco
que decapita a lo oscuro
para que la verdad se derrame?
© Marina Cecilia Kohon
Marina: un poema de gran fuerza, donde la voz surge del dolor, de la lucha, de la herida. Es el parto donde nace la palabra, admirablemente plasmado en la síntesis de tu voz.
ResponderEliminarMe gustó mucho Irene Marks
el tajo que crece... ilimmitado dolor, y palabras que no queremos escuchar, es lo que le da fuerza vital a este bello poema. susana zazzetti.
ResponderEliminarmuy bueno^ cecilia^^
ResponderEliminarm.e.
Como lluvia tranquila o tormenta, ...que la verdad salga y se derrame...!!!
ResponderEliminarcomo tu voz poética Marina,
Beso grande!
Montse Bertrán
cecilia que fuerza tiene este poema!!! me encanto avanti
ResponderEliminarFAbiposse
Irene, Susana, M.E., Montse, Fabi, muchísimas gracias por las lecturas y comentarios, los aprecio mucho.
ResponderEliminaraños?? siglos??...hasta que algo verdadero en la garganta estalle y supure...briosamente, un abrazo, Marina, María Chapp
ResponderEliminarMe encantó ese toquecito místico, Marina...
ResponderEliminarCuál es el límite? Buena pregunta en un poema para pensar, así lo degustamos mejor.
ResponderEliminarAbrazos
Betty
María! gracias por dejar tus palabras, va otro abrazo para vos.
ResponderEliminarGracias Eduardo!
Un gran cariño Betty.
David Antonio Sorbille dijo...
ResponderEliminarMe encantó tu poema, Marina. Un abrazo
Cuál es el límite, cómo se llega a lo inexpresable? Un tema fascinante en un poema muy intenso.
ResponderEliminarUn beso, Marina, felicitaciones!
Silvia R. Ares
A veces una palabra puede hundirnos en el abismo o levantarnos de las cenizas HERMOSO POEMA !!!
ResponderEliminarGracias David, Silvia y Norma por la lectura y las palabras.
ResponderEliminarMarina, este poema me movilizó, me dejó pensando, lograste decir que la verdad ilumina de un modo poético único, tal vez porque, como dice Irene, se trata de la verdad que nace del tajo, de la herida, y nos deja temblando o cualquier imagen que quieras ponerle. Muy bueno, abrazo, Marta Ortiz
ResponderEliminarGracias Marta, un gusto que te hayas detenido en mis letras. va otro abrazo.
ResponderEliminarOpino lo que Monica Gianico, hay que saber usarla, puede ser un arma de doble filo, me encanto la forma, el decir, el mensaje
ResponderEliminarun abrazo
patricia corrales