Poema de María Eugenia Caseiro
Soliloquio
Dentro del botiquín, descalza, con la risa
que siempre se acompaña del bramido del marco
que contiene los ecos y el augurio del viento,
veo la caravana impune de los días
asaltar con sus horas como un juego de niños.
Parece que me escondo mirándome a mí misma,
apoyando el reflejo del oscuro en que salto
con los pasos del tiempo en la hoja del mundo,
pero viajo en mi marco como un barco perdido
que se aleja del llanto con su risa sin ruidos.
© María Eugenia Caseiro
7 comentarios:
Me encantó esta prosa...el texto te va llevando como si fuera el viento mismo. Muy bueno
Lily Chavez
Es un lamento, una proclama, un conjuro. Es un poema
Este hablarse desde cada minuto, desde cada dolor para salir iluminado sin temer al rumbo, aleja los temores.
Bella prosa Buhita.
abrazos
Elisabet
gracias^ mis amigos todos^^^
buhamente^^^
m.e.
Huy, que poema más bien logrado, evoca a los de Ferando Pessoa, pero desde luego, con tus palabras e imágenes, muy bien
felcitaciones
Walter Mondragón
Querida María Eugenia
En la caravana impune de los días surge este hermoso poema que nos refleja en sensaciones, pérdidas, desconsuelo y también esperanza
Un beso
Graciela Licciardi
Como siempre, Mariú, tus poemas tienen música propia y toda la fuerza conmovedora que te caracteriza.
Aplausos, bises y besos
María Rosa León
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