En el ocaso de la tarde
A “¿Hay alguien en casa?”
de María Isabel Pazos (2002)
En el ocaso de la tarde parábolas girondinas
destinan su albedrío en el ardor de la sombra
mientras los caminantes en travesía incesante
tejen su piel vegetal entre juncos
y espigas en la orilla de los sueños
danzan como pájaros alrededor del faro de la vida
trazan la memoria de los dioses milenarios
cenizas remotas de los espíritus
en el límite del tiempo
jinetes de la noche armados
con palabras escritas desafiando el olvido
y consagrando la transparencia
en las manos de una mujer
que habita la casa de su genial poesía
© David Sorbille
La genial poesía es la tuya, me encantó...besos...Any
ResponderEliminarEsos jinetes de la noche armados con palabras escritas desafiando el olvido, no pueden ser sino poetas, David.
ResponderEliminar¡Genial tu poesía!
Aplausos, bises y un gran abrazo
María Rosa León
Este poema es un homenaje; imágenes que atraen y un final estupendo
ResponderEliminarUn gran abbrazo
Betty
David, esos "pájaros trazando la memoria de los dioses milenarios,
ResponderEliminarcenizas...en el límite del tiempo" son de un simbolismo místico y poético admirable.
Aplausos, David
Ignacio
siempre habitando la casa, David, muy bueno!
ResponderEliminarBesosssssss
David:
ResponderEliminarbasta con leer tu poema
para escuchar tu voz.
Un abrazo.
Tere Vaccaro.
Generosa y estupenda esta idea tuya, David, de escribirle poemas a los libros de tus poetas contemporáneos. Y la ejecución, bueno, es de alto vuelo.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella
Bello homenaje para un bello poema. Felicitaciones, beso de Alicora.
ResponderEliminarBellísimo y habitado poema, David.
ResponderEliminarMe encantó.
Abrazo,
Alicia Márquez
Qué bueno David!...Tu poema tiene hermosas imágenes..."los caminantes en travesía tejen su piel vegetal"...
ResponderEliminargracias por compartirlo,
Saludos poéticos
Montse Bertrán
Querido David: tu poema galopa de a poquito y mientras se sigue leyendo cada verso es una imagen que te apura a seguir en ese estado de elevación constante hasta que cuando concluye igual se sigue en estado de gracia y plenitud.
ResponderEliminarEs bellísimo, y yo sigo corriendo detrás de cada imagen y crezco.
Un abrazo
María Paula Mones Ruiz
Querido Davide,
ResponderEliminarcuánta hondura en las imágenes que transitan este poema, con la generosidad que es propia en tu palabra para reconocer a tus pares. Muy bueno, te felicito!!!
un abrazo entrañable
Elisa Dejistani
¡Ah, David! ¡Que bueno disfrutar de tu poesía! La palabra justa, la intención adecuada. Bravo.
ResponderEliminarque maravilla DAvid
ResponderEliminarhondo//tierno
desde graciela abrazo
David A. Sorbille dijo...
ResponderEliminarQueridos Amigos: cuánta buena onda. Mil gracias!!! Un abrazo.
Gracias por compartir este bello poema, tierno y profundo.
ResponderEliminarUn saludo Ana Romano.
gracias por compartir tan bello poema, tierno y a la vez profundo.
ResponderEliminarUn saludo Ana Romano.
ME GUSTÒ MUCHO TU POEMA . ALGO DISTINTO A LO QUE ACOSTUMBRO LEER DE TÌ
ResponderEliminarME GUSTA LA VARIABILIDAD DE IMÀGENES, COLORES, Y EL SONIDO DEL POEMA CASI MÀGICO!
GRACIAS POR ESTAR!
LIDIACC.
David:
ResponderEliminarestee poema que es otra de tus "ofrendas" tiene una multiplicidad de sensaciones, musicalidad, imágenes que llevan a leerlo y "verlo" desde cada verso.
Un abrazo,
Gra Bucci
qué buen poema David! me gustó mucho el ritmo, geniales las imágenes también. menos mal que volví por acá porque sino me lo perdía.
ResponderEliminaruna maravilla David; me cautivó. besos
ResponderEliminarLili