4/2/12

Poema de Leonor Mauvecin



De niña aprendí a escudriñar fantasmas.
Jugué con ellos en el último altillo.

Me vestí del blanco sudario
con el viento que asusta
y golpea puertas y ventanas.

Y ahora que el tiempo despierta demonios
y esparce el blanco fulgor sobre la sombra,
busco en vano la orilla donde la realidad se instala
y construye simulacros:
ciudades incendiadas, avenidas
y balcones
para mirar con dolor mi propia orilla
desnuda de fantasmas.

© Leonor Mauvecin

Etiquetas:

23 comentarios:

Blogger sacanueces ha dicho...

mi querida poeta, una belleza! pero me he quedado como triste... algo dolorido... sentí tu sensación de desamparo... no sé
gracias!!!
un beso enorme... se te quiere y extraña mucho!!!
francisco

4 de febrero de 2012, 16:09  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Me encantó tu poema Leonor

El desafío del juego en la orilla la propia oscuridad nos lleva en un viaje del que nunca se vuelve igual. También escudriñar la oscuridad en la se ha localizado el universo. Felicitaciones.

Moni Indiveri de Vega

4 de febrero de 2012, 17:34  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Bellísimo, Leonor.

Un abrazo,

Alicia Márquez

4 de febrero de 2012, 18:43  
Blogger Susana Lizzi ha dicho...

Muy buen poema, a mi parecer.

4 de febrero de 2012, 20:12  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Leía tu poema Leo, de gran profundidad y con ese estado triste que solemos tener a veces los poetas y me despertó una sonrisa nuestro común amigo Francisco, ÉL quedó triste con el poema, él que nos ahoga con los suyos.Te disfruto Leonor, mucho, mucho.

Lily Chavez

4 de febrero de 2012, 22:24  
Blogger Elisabet Cincotta ha dicho...

Excelente poema, deja a la angustia instalada, pero cuán identificada me siento.
abrazos
Elisabet

4 de febrero de 2012, 23:04  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Mirar con dolor la propia orilla desprovista de fantasmas...Aunque con un halo de tristeza, me gustó el poema.
Abrazos
Maria Cristina FErvier

5 de febrero de 2012, 3:14  
Anonymous Anónimo ha dicho...

me llegó tu poema leonor
tristemente bello
desde graciela abrazo desde alguna orilla

5 de febrero de 2012, 15:51  
Anonymous Roxana Palacios ha dicho...

qué lirismo, dama!, gracias por compartir, y gracias siempre al anfitrión!

5 de febrero de 2012, 23:57  
Blogger Ricardo Juan Benítez ha dicho...

Leonor de fantasmas y demonios creas magia, pura poesía.

6 de febrero de 2012, 10:31  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Un itinerario de vida magníficamente retratado. Gracias, Leo, por esta hermosura. Besos.

Jorge Luis Estrella

6 de febrero de 2012, 13:46  
Anonymous eduardo chaves ha dicho...

Leonor
bello poema que transmite esa inquietud constante que habita en algunos corazones sensibles. El poema relata esas sombras, esos fantasmas que nos persiguen silenciosamente. Felicitaciones. Eduardo Chaves

7 de febrero de 2012, 10:28  
Blogger ignacio ha dicho...

Leonor, constru+ido con la mente, pero creado por algo que está mas alla de la mente, este bello poema
atrapa y deja pensando, destila algo de tristeza,es verdad, y el choque con la realidad que nos revela la conciencia.
Excelente poema
Ignacio

7 de febrero de 2012, 12:07  
Anonymous Isabel ha dicho...

LEONOR, es un gran tema la pregunta de qué es más terrible:la imaginación, el juego o la realidad.
Esupendo poema que abraza esta inquietud. Con un ritmo perfecto,me encantaron los versos "busco en vano la orilla donde la realidad se intala" justo en ese contexto y "para mirar con dolor mi propia orilla/desnuda de fantasmas."
Mi admiración por haber dado con la nota justa. Voy a difundirlo y te voy a seguir en este blog que depara sorpresas.
Un abrazo
Isabel Llorca Bosco

7 de febrero de 2012, 12:49  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Qué hermosa poesía, Leonor!. Conmovedora, además, la belleza y desolación de la imagen elegida.
Siento que en tus letras corretea una niña que tiene la riqueza, la sabiduría de saber el valor exacto de jugar con los fantasmas, vestirlos con sábanas, jugar al miedo, asustarlos!. A la mujer que también transita tu poesía, como ocurre en cada uno de nosotros, creo que habría que invitarla a que vuelva a poblarse de fantasmas para jugar. La realidad cruda, devastada, sin velos, sin la luz de la mirada amorosa y ficcional, es un páramo que nadie puede ni merece habitar.
Disfruté de tu poesía!
Un abrazo
Amalia Zacoutegui

7 de febrero de 2012, 14:21  
Anonymous Anónimo ha dicho...

así como la metamorfosis de una mariposa, se despliega tu poema
saludos
Anahí duzevich Bezoz

7 de febrero de 2012, 17:36  
Blogger Rosa Lía Cuello ha dicho...

Hermoso poema Leo,nosotros y nuestros fantasmas, nuestras luces y nuestras sombras...la realidad.
Abrazos
Rosa Lía

8 de febrero de 2012, 16:27  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Por la similitud de la infancia y por esa orilla desprovista de fantasmas, un abrazo a tu poesia.
Patricia Corrales

10 de febrero de 2012, 10:05  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Leonor,me parecio hermosamente triste, hay un desencanto en esa pérdida de la magia de la niñez y en la certeza de lo real que duele .Siempre disfruto con tu poesía contundente y precisa.
Un gran abrazo,
Juany Rojas

10 de febrero de 2012, 22:17  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Exquisito poema querida Leonor !!! tus palabras maduran la nostalgia cuando verso a verso se tejen. Hilandera del alma entre el ayer que tanto marca y el hoy casi mañana ... Bendiciones, Alfredo Lemon

13 de febrero de 2012, 11:47  
Blogger Mónica Angelino ha dicho...

Para leer sin temor a la belleza.

Besosssssssss

14 de febrero de 2012, 18:35  
Blogger Alejandra Leonor Parra ha dicho...

Qué bello Leonor, me gustan tus fantasmas, tu profundidad.. mmuchas gracias!

27 de febrero de 2012, 21:48  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Leonor: con tu poesía se hace presente esa niña interior creativa y jueguetona que conjura la triste realidad, crea amor con las palabras, aunque el mundo genere desamparos....gracias!! Un abrazo, María Chapp

28 de febrero de 2012, 12:00  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio