VUELTA A LA NOCHE
Antes fue la noche
Es hora de regresar a ella
El bosque está en penumbra
La arboleda guarda en su ramaje
el vapor de todos los alientos
y la grieta de donde emergimos
se abre a la sombra del padre que cuida
En la hojarasca nos dejamos caer
y con la oreja pegada a la tierra
sentimos el largo latido de años que se esfuman
© Leonardo Martínez
"La arboleda guarda en su ramaje el vapor de todos los alientos".
ResponderEliminarBello tu poema verde.
Un abrazo,
Alicia Márquez
Hermoso poema, Leonardo, colmado de sabiduría y humildad!!! Besos, María Chapp
ResponderEliminarMagnífico como simpre, Leonardo...
ResponderEliminarSentir el latido de tierra adentro me encantó, buen poema para mi gusto.
ResponderEliminarUn abrazo
Betty Badaui
Todos pegamos esa oreja a la tierra en busca de lo ido... qué bello Leonardo!! gracias
ResponderEliminarHermosísimo, Leonardo! Qué belleza la de tu decir y la de los sentidos posibles que encierra.
ResponderEliminarLo sentí como una reflexión sobre el vivir y el morir, sobre ese volver a la noche, luego de haber surgido desde ella.Esa arboleda de la vida que guarda tantos alientos, tanto sentido, tanto transitado!. Volver a la tierra, volver como las hojas, como todo lo vivo.Maravilloso el tono que recorre toda la poesía: se escucha el amor. Sólo saber del amor dado y recibido, me parece, permite decir que en la grieta que nos aguarda irremediablemente hay un padre amoroso que cuida y espera.
Qué conmovedora!. Me encantó!. Un abrazo
Amalia Zacoutegui
algo que siempre me encanta de su poesía, Leonardo ... el tiempo se vuelve espacio ... la noche, la siesta ... rincones del paraíso donde nos es dado entrar como un milagro ... GRACIAS !!!
ResponderEliminarun abrazo
Lía Miersch