PESADILLA
Sueño que se agota todo el petróleo del mundo, que se consume todo el gas. Una conflagración termonuclear evapora y arroja fuera de la estratosfera toda el agua del planeta y se calcina toda la biosfera. Se extingue la galaxia, se apaga el sol y la luna se pulveriza. Pasa el heladero. Le compro uno grande de crema rusa y chocolate, lo paladeo con exquisito placer. Sigo soñando.
© Rubén Vedovaldi
Foto: Gustavo Tisocco
LA FIGURA DEL EXTERMIO DEL HOMBRE DEL PLANETA QUE TODO LE DA! Y ESA DOSIS DE LA INCERTIDUMBRE DESTRÁS DE UN SABROSO HELADO...
ResponderEliminarME GUSTÓ ESA EVAPORACIÓN DE LA ANGUSTIA POR LO HA SIDO ANTE LA IMPOTENCIA.
LIDIACC.
Qué lindo, Rubén, empezar el año con buen humor levemente irónico
ResponderEliminarBuen año
Betty
Nada como un hermoso helado de crema rusa y chocolate para endulzar todas las angustias del planeta, Rubén.
ResponderEliminarEso sí, evitá combinar crema rusa con crema americana para evitar una tercera guerra mundial. ¿Sí?
Aplausos, bises y besos por tu ingenio y humor
María Rosa León
Tal vez el heladero fuera el sueño y la realidad tu sueño ¿no?
ResponderEliminarGus... ¿como conseguís esas "poesías fotográficas"?
Un sueño o la misma imaginación crearon este poema , mientras podamos paladear el helado todo anda bien , despues ...veremos
ResponderEliminarmaria elena tolosa
querido amigo
ResponderEliminarsueño y realidad se mezclan
mientras chorrea el helado
y deja pegajosa la piel
desde graciela abrazo
Una genialidad tu poema, Rubén. Una invitacion llena de humor, para sentarnos a ver como corren los jinetes del apocalipsis en los suburbios de nuestra cama, en los pasillos estrechos de la cocina... en el delgado tejido de tu sensibilidad, en la edad radiante de tu sabiduría...
ResponderEliminarALVARO BALTAZAR CHANONA YZA.
Con toda la carga surrealista, va y viene entre el sueño, una sugerente amenaza de cercana hecatombe, de conflagración futura.
ResponderEliminarPara nada veo humor en tu sabio poema, sino el gesto pueril como panacea del horror.
Felicitaciones por este poema.
Susana Giraudo
Maravilloso delirio, lleno de miedos como si fueras un niño.
ResponderEliminarMe sorprendió el final.
Sueña, nunca dejes de hacerlo.
Los sueños sueños son.
Besos