Gemido del latido
El tiempo nos detiene
aprovecha la espesura de la muerte
nos separa, nos acecha, nos alcanza.
Ningún límite y el revuelo del sueño aflora.
nos roza, sobre el mundo que detiene sus alas.
y desnudo el infinito nos sucumbe en su recta arrojada.
El temblor cierra el círculo, nos desmadra.
Nos pierde en la memoria del gemido del latido.
Enciende el dolor, el llanto y la mirada secreta
guarda la imagen del hombre que fugó de la palabra.
El tiempo nos detiene
aprovecha la espesura de la muerte
Hoy lo dejo viajar hacia el poema eterno.
© Lidia Cristina Carrizo
"la memoria del gemido del latido"
ResponderEliminar"..hoy lo dejo viajar hacia el
poema eterno"LIDIA HERMOSA respues
ta a esa muerte de los gusanos y
la nada UN ABRAZO Angel
"la imagen del hombre que fugó de la palabra! wuauuuu, bien Lidia, muy bien.
ResponderEliminarUn abrazo
Lily Chavez
El tiempo detenido en ese poema eterno, Lidia.
ResponderEliminar¡Qué maravilla!
Aplausos, bises y besos
María Rosa León
Lidia:
ResponderEliminarEscelente poema. Me encanta. muy bueno.
Saludos, Camilo