Poema de Alicia Márquez

LA INSEGURIDAD

Una cuatro por cuatro con olor a nuevo,
una cadenita de oro, recuerdo de un recuerdo,
un televisor de pantalla gigante,
de esos en los que las escupidas
de los jugadores de fútbol te pegan en el ojo,
un aire acondicionado que te sopla frío y afuera
todos tienen la lengua que les llega al piso,
una pulsera de plata, tintineante,
un prendedor de marfil, recuerdo de un elefante,
un juego de cubiertos de la bisabuela,
como para tirarse de cabeza en las cucharas de sopa, gigantescas,
un cuadro consagrado de un paisaje fantástico
firmado por un pintor estupendo,
unas zapatillas con luces para doblar en las esquinas,
un enceguecedor anillo de rubíes
no son nada.
No son nada, absolutamente nada,
totalmente nada
profundamente nada.
Porque la inseguridad,
la verdadera inseguridad,
la tan mentada y crispada inseguridad,
la inseguridad en toda su temblorosa acepción
es
no tener para comer.


© Alicia Márquez