22/9/11

Poema de Marizel Estonllo


Una píldora en el piso

Rodó como un pequeño sol anaranjado
y se detuvo.

La aplastó alguna pisada
sin embargo mi curiosidad pudo con ella.
La levanté y me la tragué.

Temieron por mi ,
quisieron que la vomite
ya era tarde,
fue imposible.

Era de un color anaranjado
como un sol muy feliz
y me la tragué
como a toda la infancia
estancada en un cubo de sombras.
© Marizel Estonllo

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7 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Gracias, Marizel!!! ...
un abrazo
Lía Miersch

22 de septiembre de 2011, 1:43  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Una maravillosa evocación de la infancia que ve soles en una píldora anaranjada.
Felicitaciones, Marizel y un beso grande
María Rosa León

22 de septiembre de 2011, 6:53  
Anonymous betty badaui ha dicho...

Marizel, qué admirable forma de decirlo, qué gusto leerte
Betty

22 de septiembre de 2011, 23:49  
Blogger Adriana ha dicho...

¡Terrible! Es un poema durísimo, de gran impacto, como la excelente imagen que eligió Gus. Tiene la hermosura y la crudeza de las revelaciones y los descubrimientos. Gracias por el poema. Un abrazo. Adriana Maggio

23 de septiembre de 2011, 11:44  
Anonymous Anónimo ha dicho...

para los que creen que la poesía es sólo aderezo de guirnaldas^^^ te felicito^^^
buhamente^^^
m.e.

23 de septiembre de 2011, 16:12  
Blogger Nerina Thomas ha dicho...

ja!! Genia!! Maravillosos tus versos. Qué mensaje hermana!!
Un abrazo

23 de septiembre de 2011, 22:00  
Anonymous Anónimo ha dicho...

gracias por los certeros comentarios ,me encantó recibir la hondura con que se interpretaron estas metafóricas líneas de este poema real ,un abrazo a todos

23 de septiembre de 2011, 23:42  

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