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19/8/11

Poema de Susana Giraudo


Duerme desde hace tiempo
con las cuencas vacías,
un dedo amputado
y lágrimas que no mojan.

La dejaron allí, otras manos,
(¿O las mismas manos mías hace cuánto?)
Y allí está
olvidada y juiciosa,
quieta
desnuda y sola.

Era su nombre Diana.
¿Será así, Diana, todavía de loza?
Le ensortijaba el cabello
de lana suave,
oscura,
y ella se estremecía
en su cuerpo de estopa.
© Susana Giraudo

8 comentarios:

  1. ¿Será ese el destino final de algunos juguetes? ¿recordarnos que alguna vez fueron lozanos y bellos? ¿Traernos la nostalgia del tiempo en que nosotros eramos lozanos y bellos y jugábamos con ellos? Y les poníamos nombres, y dormían en nuestra cama... no solos en el desván. ¿Se nota que me gustó?

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  2. ay, Su, me parte el alma este poema: tan delicado, tan lleno de recuerdos y de infancia, tanta vida en esa muñeca. un abrazo a las dos. susana zazzetti.

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  3. Que hermoso Su querida, sin duda ese debe ser el destino de todas las muñecas , tambien las dejé abandonadas aunque no eran Diana, lo mismo las recuerdo
    abrazo

    maria elena tolosa

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  4. Susana:
    Muy bello tu poema. La nostalgia plasmada en esos recuerdos in fantiles llena de vida y sentimiento al lector.
    Saludos, Camilo

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  5. todas tenemos alguna Diana por ahí. Muy bueno!

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  6. dulce muñeca y dulces juegos,como

    mi 1ºmecano oxidado incompleto don

    de aprendiamos a servir a querer

    Susana Giraudo Gracias por Tu Poe

    ma,por tener lugar todavia para

    esa Niña Abrazo Angel.

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  7. añoranza y excelente trabajo
    saludos
    Anahí Duzevich Bezoz

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