TODO ES POLÍTICA
Estalle, o no, la lengua, el corazón
de la piedra por causas que hablan de tu conducta,
no habrá tragedia, ni saga, ni tan siquiera
chisme del vecindario que le interese al juglar,
al escriba, ni al mensajero procaz.
No por ello habré de descuidar lo que habita en mi jardín.
Todos, de algún modo, nos hemos vuelto
atentos defensores del eco sistema.
En cada uno, el estallido
o la perdurabilidad de las cosas,
incluso en el duro corazón que resguarda la piedra,
hace que el equilibrio tenga la oscilación suficiente
para volvernos más o menos débiles,
o pasto de las fieras, definitivamente.
Regresa con sumo cuidado las herramientas
que te prestaron para trabajar la parcela.
Que no haya mella en los filos,
ni herrumbre, ni restos de la poda.
Cualquier desengaño termina siendo un fruto menos
en la mano de los demás.
Es lo que, en la macro política,
los cínicos llamarán daños colaterales.
© Patricio Emilio Torne
Excelente entrega Patricio.
ResponderEliminarSaludo desde Córdoba
excelente. susana zaszzetti-
ResponderEliminarMuy bueno. Gracias y abrazo
ResponderEliminarInés Legarreta.
Buenas imágenes compañero!
ResponderEliminarMuy bueno!! Un poema para reflexionar. Los daños colaterales abundan. Bea Belfiore
ResponderEliminarMuchas gracias por sus lecturas y sus palabras
ResponderEliminarJusto cual bisturí, facinas
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