Pasífae
Anterior al de piedras y vergüenza
hice mi laberinto.
Solo yo puedo verlo.
En él he guardado el testimonio:
cuernos y pezuñas
el sexo bestial
Dédalo y el poder del engaño.
En él me refugio
desde su centro
(mi Labrys)
contemplo
mi venganza privada
el sexo despreciado de Minos
su piel lampiña y blanda.
Mi laberinto personal
hecho
de la consumación de mi deseo.
© Mario Alberto Manuel Vázquez
Muy buena la imagen del laberinto. Pauli
ResponderEliminarBuenísimo. Gx, Irene.
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