Desde hace algunos días hay un hombre viviendo en mi casa
y esta tarde de frente lo vi.
La luz blanca de la cocina iluminando
su rostro, los pómulos deshidratados
las orejas, su ancho cuello.
Esta tarde entonces le pregunté
cómo se llamaba pero él no dijo nada
no habló, no hizo gesto alguno
ninguna pista aunque lo miré de muy cerca.
Impávidos los dos.
Anochece y fumo
sentada en la ventana.
Lo observo sentado en la única silla de la casa
frente al escritorio, no me mira
tiene en cambio
los ojos clavados en la pared.
Creo que intenta atravesarla.
Temo que está atrapado y no sabe
a dónde ir.
Voy a dejar la casa ésta noche
me iré antes de que la oscuridad
sea plena.
Y espero no verlo al regresar.
© Pilar Sanjurjo
Misterioso poema
ResponderEliminarQué bueno poema!!
ResponderEliminarQué buen poema!
ResponderEliminarM E GUSTÓ, lo leo antes que desaparezca el poema.
ResponderEliminarSaludos.
Anahí Duzevich Bezoz
Mucha intriga en el poema. Me gustó ♥️🦋
ResponderEliminarMuy bueno principalmente por sus sugerencias...
ResponderEliminarEXTRAÑO. UNA APERTURA A LA REFLEXIÓN. SUSANA ZAZZETTI.
ResponderEliminarUn poema lleno de misterio y sugestion. Interesante. Pauli
ResponderEliminarLundo poema!!! Cristina Noguera
ResponderEliminarMuy buen poema, Pilar
ResponderEliminarMuy buen poema. Misterioso, sugerente. Oscila más allá de lo real. Edda.
ResponderEliminar