Algo de todo el polvo que levantan, es mío
Jorge Boccanera
No quiero mirar desde la banquina
los errores de los otros
ni apuntar con el dedo
el humo que se va por el desagüe
la carretera es de todos
las curvas del llano
los carteles
la velocidad y las lagunas
los árboles que esgrimen señales
las líneas amarillas y blancas
observo la inmensidad de la ruta
y me convenzo:
hay que poner el pie en el asfalto
tomar el carril
equivocar el camino si hace falta
cada quien escupe por la retina
el colmillo de algún pantano
cada quien guarda en los bolsillos
un carbón de luz
el eje de alguna carreta
es necesario que nos alejemos del poste
del frágil semáforo intermitente
movernos avanzar pasar la niebla
para todos existe una fe de errata
el momento para cruzar
la porción de lluvia
la parcela de fuego que nos nombrará.
© Liliana Chavez
Muy bueno querida Lily.
ResponderEliminarY sí: "la carretera es de todos".
Te abrazo grande!
Qué placer leerte siempre, amiga!
ResponderEliminartu poesía me hace bien
abrazo
Claudia
Tu poema es la experiencia y la reflexión que siempre llega luego de andar todos los caminos.
ResponderEliminarSusana Giraudo
Maravilloso, poeta!!!! Gracias!!!!
ResponderEliminarTsn profundo y bello, Lily! ...para todos existe una fe de errata...abrazo. Fabiana León
ResponderEliminar"la porción de lluvia/la parcela de fuego que nos nombrará"... hermosas líneas... gracias
ResponderEliminarPara cada uno la lluvia que nos iguala
ResponderEliminarLETRAS REFLEXIVAS, PROFUNDAS, que incluyen todo. Buenísimo.Saludos.
ResponderEliminarAnahí Duzevich Bezoz