Soneto
Vas a llegar a mí un día de ésos
Desandando uno a uno tus cerrojos:
Navegarás furtiva hacia mis ojos,
Naufragarás a orillas de mis besos.
Vas a llegar a mí, no habrá regresos
De nuestros corazones como abrojos;
Te reconocerás en mis despojos
Que ya saben a vos, de puro presos.
Tu presencia va liándome las venas
Y en vez de corazón, me late apenas
Un capullo con pétalos de acero.
Tu ausencia es quien me alumbra y quien me nombra.
El día que te encuentres con mi sombra
Comprenderás, tal vez, por qué te espero.
© Claudio Simiz
QUE BUENO RECORDAR LOS SONETOS ME ENCANTÓ EL TUYO
ResponderEliminarLeerte, Claudio, siempre es un placer y ese verso "un capullo con pétalos de acero", es genial!
ResponderEliminarBesosss
Bello
ResponderEliminarSencillamente perfecto
ResponderEliminarUn gusto leer este soneto. Muy tierno. Abr4azos. Rosa Lía
ResponderEliminarMe gustó mucho. Excelente ritmo y originales imágenes que lo incorporan al siglo XXI de las letras. Un abrazo. Adriana Maggio (Dirbi)
ResponderEliminaruf que profundo me llegó hasta las entrañas. Hermoso lleno de de imágenes, nostalgias y esperanzas... sin palabras Ud nunca deja de sorprendernos poeta. Felicitaciones...
ResponderEliminarMargarita.