Los días
contados
Agendo
grandes fechas
en grandes
invisibles almanaques:
te veo hoy,
mañana y pasado
y son tres
días de fiesta.
Un
miércoles que no sabe de desasosiegos,
café
boutique y besos en la escalera.
Jueves que
borra la sombra del mundo,
manos
milagro y galletitas.
En la
escalera termina el viernes
y su
kamasutra de palabras.
Vos y yo y
las escaleras
nivelando
siempre este parejo amor.
Disimulamos
que hace un año
de la
bienvenida en la mesa y el espejo
anunciando
este mismo mes
que no
debería llamarse mayo.
Se merece
un nombre inmaculado
-de primera
mano,
que nadie
haya pronunciado jamás-
para
apropiárnoslo nosotros los sin rótulo.
Nos
celebramos como si nada,
susurrando,
mirando para otro lado.
Te despido
en el puente,
y desde
ahí, más cerca del cielo
agradezco y
pido.
A mis pies
se cruzan los trenes imitándonos
y una
enorme mancha dorada
interrumpida
por el liquidámbar ardiendo
inaugura
otoños.
Corro a
preparar mejunjes y arechuques varios,
entibio
bálsamos y guardo en mi cartera
todo tipo
de talismanes por las dudas,
me aseguro
del dije rojo siempre en mi muñeca
contra
envidias y tantas otras miserias.
Que ningún
miedo amenace
nuestra
historia no bautizada.
Que no se
interrumpa el arrullo
de tu voz
urdimbre en mi pelo.
Que nadie
se rinda esta vez
y no
taladren el atardecer los perros
aunque
insistan en mostrarnos
sus
colmillos chorreando miel.
© María
Laura Coppié
Bellísimo! que sea el amor!. Preciosas imágenes! Abrazote
ResponderEliminarYa conocia este hermoso texto Bella Malala. Sin embargo me sorprende cada vez de manera difernete. No es lo mismo leerlo con mi voz susurrando en la pc que escucharlo brotar de vos. Gracias
ResponderEliminarDiego Bennett
el amor sin título, nombres sin estructuras, armonizando las buenas vibras; lindo.
ResponderEliminar.
Bello bello bello
ResponderEliminarfloralevi
Bello poema, Malala. Me sugiere una emoción etérea y contundente a la vez.
ResponderEliminarAbrazo.