13/3/13

Poema de Claudio Simiz


Ultima bitácora
(final) 

De mástiles quebrados.
De dislocados remos.
De furtivos escualos
     feroces,
           inocentes.
De pura,
     de embriagada
            orfandad.
De cierto astro
     mareado, desastrado.
De tanta incierta,
      acorazada niebla.
Acaso amanezcamos,
      emerjamos
          algo,
brisa,
    relente,
          espuma.

 

© Claudio Simiz

20 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Este poema encierra la magia trágica del mar, el naufragio es tal vez el final de toda travesía,
y la soledad es un nafragio permanente, del que a veces se emerge algo, como "brisa, relente,
espuma"
así se siente este hermoso (en muchos sentidos) poema
Gracias
Ignacio

13 de marzo de 2013, 19:50  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Hola conpañero, siempre abrazado a la poesía. Un abrazo
Ruben Amaya

13 de marzo de 2013, 23:19  
Blogger Teresa Gerez ha dicho...

ojalá sea así. Por lo pronto, lo que hay y cóo lo dijiste es fatalmente belo.

14 de marzo de 2013, 1:19  
Blogger Gastón Sequeira ha dicho...

Me gusto mucho tu poema, te felicito, un abrazo. Gastón Sequeira

14 de marzo de 2013, 10:29  
Anonymous Anónimo ha dicho...

fuerte, de una belleza pura y trágica. todo un amanecer entre niebla y espuma. susana zazzetti.

14 de marzo de 2013, 19:52  
Anonymous Anónimo ha dicho...

La vida nos maltrata, a veces. Pero es sólo eso: la Vida. Y ésa es la inspiración para el poeta, que hace que se escriban hermosos poemas, como el tuyo. ¿Qué sería de la poesía si fuésemos totalmente felices, cada día, cada hora, cada minuto?
Celina

15 de marzo de 2013, 10:25  
Anonymous Pauli ha dicho...

"Acaso amanezcamos...", ¡qué bueno el final de tu poema! Me gusta mucho tu estilo, Claudio.

15 de marzo de 2013, 21:21  
Blogger graciela barbero ha dicho...

Bello, después de la tormenta, la calma
Graciela Barbero

15 de marzo de 2013, 22:22  
Anonymous Anónimo ha dicho...

La tragedia se desliza por tus versos que tienen una mágica melodía, para dejar abierta esa luz de esperanza en el final.
Muy bien logrado.
Graciela Bucci

16 de marzo de 2013, 3:29  
Blogger Rosa Lía Cuello ha dicho...

Después de tanto navegar la vida, tal vez,luego del naufragio final,la esperanza...abrazos
Rosa Lía

16 de marzo de 2013, 23:02  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Pintar un naufragio con palabras es solo posible para un gran poeta

maria elena tolosa

17 de marzo de 2013, 1:31  
Blogger Adriana ha dicho...

Me gustó mucho este texto, con su lenguaje marino y su bella alegoría del naufragio y la transformación. Un abrazo. Adriana Maggio

17 de marzo de 2013, 18:07  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muerte y renacimiento, tragedia y esperanza, que ALGO nuevo emerja en este aprendizaje perpetuo que es la vida, con la poesía siempre de la mano, una abrazo, María Chapp

17 de marzo de 2013, 22:14  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Claudio tu poema es la síntesis perfecta de los pasos de la vida.Gracias por trasmitir esta sensación plena...de nacerse que es vivir, morir: ir y volver.
Felicitaciones poeta.
María Paula Mones Ruiz

18 de marzo de 2013, 13:08  
Anonymous Anónimo ha dicho...

hermoso texto, me hace sentir la sensación de la depresión, la inacción del deseo, de la libido, ese deslizarse por la cornisa enjabonada de la real irrealidad asociando el todo a cosas resbaladizas como las cosas del mar, en el tumultoso acontecer cotidiano el cual rechazamos y escapamos para mantener la cordura o locura, intacta, plasmándonos plasmando los gritos verso a verso sobre la piel hereje del poema, el cual nos refleja y nos protege de las pedradas del mudo.
hermoso tu texto!
francisco
pd: claro que también sólo podría ser metafóricamente un naufragio...

19 de marzo de 2013, 18:54  
Blogger Carlos Alberto Roldán ha dicho...

Cierta afortunada certeza, eh Claudio. Habrá la emergencia inevitable y otra vez a escena, para jugarlo todo, como si no hubiera un saber de la muerte. Fe en el hombre que deja de yacer y se levanta...
Gran abrazo.

23 de marzo de 2013, 21:37  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Al modo de Ulises, el héroe griego, el poeta descubre que más allá del fingido naufragio de la palabra, ya siendo el héroe cotidiano (joiceano)será posible un sino nuevo... un algo que está en potencia, otra pregunta.
bueno, muy bueno, gracias
W.M

29 de marzo de 2013, 21:03  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Al modo de Ulises, el héroe griego, el poeta descubre que más allá del fingido naufragio de la palabra, ya siendo el héroe cotidiano (joiceano)será posible un sino nuevo... un algo que está en potencia, otra pregunta.
bueno, muy bueno, gracias
W.M

29 de marzo de 2013, 21:03  
Anonymous Anónimo ha dicho...

"...de pura, de embriagada orfandad..."
¡Qué maravilla de imágenes en tu poema, Claudio!
Aplausos, bises y un gran abrazo
María Rosa León

4 de abril de 2013, 21:24  
Blogger Germana ha dicho...

Tu poema agita mareas de renacimiento y despierta el retorno a primordiales aguas donde bucea la profundidad del dolor y la belleza.
Gracias!
Germana Martin

19 de noviembre de 2013, 22:44  

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