GRISTE
El
gris domina.
Es
el color del no color
y
tiñe todo con su pátina polvosa.
Tapia
ventanas, archiva primaveras,
abochorna
sonrisas,
es
la mirada ciega de los ojos ilusos,
el
banco de suplentes de las noches quebradas,
la
lavandina del dolor.
No
compiten con él turquesas ni naranjas.
No
hay guacamayo que lo pueda,
no
hay anémonas.
No
hay Gauguin ni Van Gogh en estos tiempos.
Hasta
el último viento que montamos
y
el aliento del volcán son grises.
Hasta
el recuerdo del rescoldo que empezara
bordó
en el alborozo.
Hasta
mi pelo que fuera de oro y luna.
Los
amores son grises, los adioses.
¡Si
hasta el cerebro es del color de los olvidos!
Viste
de medio luto el almanaque
y
están siempre nubladas las banderas.
Las
vidrieras se cubren de mordazas.
Y
los gritos se velan.
Llueve
tiza. Se anemiza la arena.
Se
mira el cielo en el asfalto.
Me
miro yo en tu último semblante.
El
pronóstico apaga las conciencias.
El
río corre lejos, no ilumina los sueños.
El
gris manda.
El
diablo se cree que se viste de rojo.
No
sabe que es daltónico.
©
Bibi Albert
De tanto aguardar alguien le dedicó un poema al gris , color relegado, mal parado, pero si es verdad todo es gris, me gustó
ResponderEliminarmaria elena tolosa
¡Que cierto, Bibi! La vida viste de medio luto y nos invade esa luz mortecina. Sólo el poeta es capaz de colorearla. ¿Verdad?
ResponderEliminarAplausos, bises y besos
María Rosa León
Hermosa fuerza tomó el gris en esta poesia.Me gustó muchooo.
ResponderEliminarFelicitaciones!
Alicia Corrado Mélin
Querida Bibi, dedicarle un poema al gris es algo tan atrevido como dedicarselo a la tibieza. Y sin embargo... ¡que bien! ¡Si hasta pareciera que el gris se ha vestido de los más vivos colores!
ResponderEliminarMuy bueno, sobre todo la última estrofa.
ResponderEliminarHermoso texto, con derroche de imágenes originales y muy poéticas. Gracias. Un abrazo. Adriana Maggio
ResponderEliminar¡Qué bueno, Bibi! Un poema queme dio muchísimo gusto leer. Besos.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella