El pibe de la bolsita
Nunca tendrá mañana la embriagada
Luna que aspira entre sus manos frías.
Sus noches, una tumba, y sus días
un cilicio de piel deshabitada.
No cabe el mundo en la desorbitada
pupila,
que ya muestra las estrías
de una historia contada por sangrías
y una cuna cautiva y enzarpada.
El pibe en su bolsita infla un sueño
tal vez allí, de algo sea dueño
y la barbarie no dicte las leyes.
Y mientras él su sombra va esquivando,
los poderosos siguen azuzando
sus hoscos, foscos, sordos, torvos bueyes.
© Claudio Simiz
tomaste un tema, claudio, que nos lastima a todos. creo que hay que atreverse más con lo social, porque ¿ te acordás? " la letra con sangre entra" un abrazo. susana zazzetti.
ResponderEliminar¿En que bolsita debemos respirar nosotros para soportar una realidad que nos tumba? Estremecedor
ResponderEliminarduro, fuerte, real,amigo
ResponderEliminarTe felicito!
Besossssss
Soneto, Claudio, el tuyo, que me envía al beneplácito de ese audaz verso final, jugado, siento, a lo Pedro B. Palacios, nuestro Almafuerte.
ResponderEliminarRolando
*
Reminisencias de muchas cosas que pegan fuerte en el alma, bellísimo, felicitaciones
ResponderEliminarmaria elena tolosa
Qué hermosos los dos primeros versos de este poema tan amargo...
ResponderEliminarMuy bueno, Claudio, como siempre.
La orfandad y la indigencia es una herida abierta que sangra! Muy bueno Claudio, felicitaciones!!!
ResponderEliminarUn cáliz amargo que bebemos todos los días...tristísima realidad dicha con maestría, besos, María Chapp
ResponderEliminarSoneto conmovedor escrito con la sangre. Coincido con Rolando que tiene un final a lo Almafuerte. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarJorge Luis Estrella
coinido: la forma del soneto le viene bien a un poema que canta e ironiza, muy bien
ResponderEliminarWalter Mondragón
Creo que fue una buena elección hacer un soneto para atravesar con musicalidad un tema tan atroz. Saludos.
ResponderEliminarEl día llegará, Claudio, en que no haya más bolsita, no perdamos la esperanza, en que el aire sea puro y la mirada clara, el día llegará. No perdamos la esperanza... y el estómago satisfecho no duela de hambre...
ResponderEliminarCelina
Un poema conmovedor, Claudio: doloroso y a la vez tierno...
ResponderEliminarGracias por tu poesía,
un gran abrazo.
Mariano Shifman
... para los que dicen que el soneto y la compasión están pasados de moda ...
ResponderEliminarun abrazo
Lía Miersch
Hola poeta: como siempre es un gusto leer sus poemas,y como siempre nos sorprende hoy con este conmovedor soneto, Ud es un poeta con todas las letras, no solo incursiona en todos los temas sino que también en sus formas. Felicitaciones!!!
ResponderEliminarDafne.